Distintas asociaciones privadasse esfuerzan para proteger y preservar los métodos tradicionales de cultivo y producción del café en México México es un país con una gran riqueza biológica, pues cuenta con un gran número de especies de plantas, animales y otros organismos.
Gracias a eso, el territorio mexicano posee las características necesarias para cultivar un cafe de excelente calidad de forma sustentable.
Las prácticas tradicionales para el cultivo de café en México consisten básicamente en dos tipos de sistemas.
Por un lado, la simple sustitución de las plantas del piso de las selvas o bosques que impacta mínimamente el ecosistema.
Por el otro, existe el sistema de plantación de policultivo en el que el café se siembra bajo un dosel de árboles con especies nativas e introducidas, acompañado de numerosas plantas útiles (pimienta, zapote, mamey, vainilla, entre otros).
Una gran parte de los pequeños productores mexicanos mantienen prácticas tradicionales de cultivo de café, que contrastan con las plantaciones agroindustriales de café bajo sol que utilizan agroquímicos y ación y la erosión de suelos.
Los sistemas de producción de café que integran árboles, ganado y pastos son zonas de refugio para numerosas especies de plantas.
Son a la vez áreas de protección de la biodiversidad y favorecen la conservación de los suelos de la acción erosiva y los regímenes climáticos locales y regionales.
El árbol de sombra en el cultivo del café protege de las fluctuaciones climáticas al conservar la humedad del aire, reducir las variaciones de temperatura, disminuir la evaporación del agua y frenar los vientos que dañan los cafetales.
Hoy en día, las técnicas de cultivo están evolucionando y varios productores mexicanos producen el café de manera respetuosa con el medio ambiente y al mismo tiempo han alcanzado un excelente nivel de rendimiento.
De la misma forma, están produciendo un café con una magnifica calidad gustativa y aromática que les permite un precio de venta más elevado en el mercado de cafés de especialidad.
