El cambio climático global ha tenido un impacto sobre la biodiversidad y la desaparición de las especies.
Diversos estudios sobre el impacto de los cambios climáticos han permitido hacer predicciones acerca del desplazamiento de las zonas favorables al cultivo de café.
La producción mundial deberá adaptarse, ya que las zonas de cultivo favorables a la especie Coffea arabica van a desplazarse y restringirse, situación que será diferente para la especie Robusta, Coffea canephora, ya que el cambio climático es másfavorable para esta última.
Esto tendrá consecuencias considerables en cuestiones económicas, porque la repartición geográfica de las regiones de producción del cafe cambiará en el futuro con un impacto importante en el mercado mundial.
Los sistemas de cultivo innovadores pueden limitar los efectos del cambio climático sobre la producción y las enfermedades al incluir variedades de híbridos más adaptados a la protección del medio ambiente.
En los últimos 50 años se ha desarrollado una agricultura intensiva.
caracterizada por el cultivo exclusivo de variedades de cafeto con alto potencial, sin árboles de sombra, utilizando insumos químicos e irrigación y mecanizando la cosecha; esto es hoy muy criticado en razón de los impactos negativos sobre el medio ambiente.
Actualmente existe una tendencia a regresar a prácticas de cultivo de sombra que toman en cuenta la influencia de los ecosistemas y que permiten un equilibrio ecológico más favorable, ya que la presencia de polinizadores y de depredadores naturales enriquecen la materia orgánica y la microfauna del suelo.
Las buenas prácticas en el cultivo del café automáticamente ayudan a conservar el suelo y el agua, facilitan la adaptación al calentamiento global y, al mismo tiempo, reducen su impacto.
Los progresos de la genética han sido eficaces en el pasado para adaptar la planta a sistemas de cultivo intensivo.
El reto en el presente es crear una agricultura ecológica que permita una buena productividad y la protección del medio ambiente.
